Juego de los cinco sentidos: Olfato.

El olfato es, quizás, el elemento sensitivo más delicado, ya que jamás se puede obviar un olor, sea agradable o desapacible. Casi todo en este mundo tiene un olor que lo caracteriza y, más aún, si hablamos de las personas. Las personas se ven gracias a la luz, pero muchas veces las reconocemos o las tenemos en nuestra memoria porque, al acercarnos a ellas, nos han dejado impregnado un olor particular.

Quisiera que con este regalo, encendieses la luz para encontrarme y, con ello, pueda adentrarme en tus recuerdos, pero, como siempre, de la manera más delicada posible.
-------------------------------------------------------------------------------------

Somos beodos del dulce aroma
Cuando, convertidos en espectro de la nada,
Nuestra alma sueña y se enloquece…

Entre ramos de amapolas y azucenas,
De lirios, margaritas y claveles.
Es la esencia que el ambiente envuelve
De onirismo que me sube a la cabeza.
De narcisos, jazmines y claveles,
Entre ramos de rosas y violetas,
Un secreto se esconde tras la puerta
Que se está cerrando, hoy, a mi mente.
Y se cerró y, como cuando un niño se alborota,
Mis sentidos se olvidaron del mañana
Para centrarse en los días, que sin ti se pierden.

Porque, contigo, me siento el beodo del dulce aroma
Que, gritando la ruptura con su alma,
Se convierte en ceniza, nube, polvo y muerte.

Comentarios

Entradas populares de este blog

A Vidal Alba de Diego, el hombre del sombrero

Justicia del Latín: iustitia-ae

palabrerías de juego intenso